29 de marzo de 2011

A por patatas


Esta noche si tienes pensado cenar tortilla de patatas, estás de suerte. No, no es que los precios de este tubérculo hayan bajado una cuarta. Además de los beneficios nutritivos para la salud que la patata nos aporta, hoy tus reservas de este alimento aumentarán a raudales. En efecto, el patatal donde jugará España ante Lituania nos suministrará patatas indefinidamente. Es lo que tiene jugar en un patatal...

Desde el pasado viernes, se han filtrado numerosas imágenes de un campo desértico, con grava y que podría pasar por un terreno de juego de torneos regionales. Asimismo, declaró Andrés Iniesta que ha jugado en campos peores cuando era alevín o cadete. Pero si hay que jugar se jugará.

Eso es precisamente lo que busca la federación lituana. En semejantes condiciones, el estadio Dariaus ir Gireno  en Kaunas no supondrá un hándicap para la anfitriona, sino más bien todo lo contario. Al estar el césped duro y poco jugable, el balón botará más y deslizará menos lo que dificultará el juego de la campeona del mundo.
El árbitro francés del encuentro, Laurent Duhamel, llegó hoy a las instalaciones para tomar la decisión de si jugar el partido o posponerlo. En este caso, la fecha pensada para el mismo se traslada a principios de junio cuando ambas selecciones tienen un hueco en sus agendas internacionales.

Los jugadores lituanos coincidieron ayer con los españoles: En campos así no se juega, declararon. Es fácil lesionarse jugando así.

El meollo del asunto es bien simple. Lituania cuenta con una liga de fútbol profesional y, evidentemente, con más campos que el Dariaus ir Gireno para disputar el choque. ¿Por qué ése y no otro? Simple. Porque a Lituania le da la gana.

El delegado de la UEFA le dio el visto bueno a un campo que, como hemos dicho, le da ventaja a Lituania. El conjunto anfitrión tendrá que sobreponer la diferencia de calidad con las condiciones del campo. Esperemos que no se lesione nadie por culpa de la mala organización.

24 de marzo de 2011

Thierry Henry en imágenes


No podía faltar un rincón dedicado a uno de los jugadores más emblemáticos del fútbol francés y al que ha sido, sin duda, mi pelotero favorito. En esta ocasión, daremos un repaso a través de una rápida serie de imágenes que intentan mostrar en primera persona los momentos deportivos más relevantes en la vida de Thierry Henry, desde la cuna hasta la cumbre. La elegancia plasmada en persona, el máximo goleador histórico del Arsenal y de la selección francesa se hace un hueco en Mis peloteros favoritos. Sin más dilación, allá vamos:

Nacido en un suburbio parisino llamado Les Ulis, jugaba en su conflictivo barrio con treinta niños más de su edad con un sólo balón. Su padre, ex-futbolista, advirtió las cualidades futbolísticas del joven Thierry y lo metió en esto del fútbol.

Su primer equipo profesional fue el AS Mónaco. No es un delantero centro cerrado. Su versatilidad por banda izquierda le permite actuar por este costado. En el equipo del Principado, actuó fundamentalmente por la izquierda mientras que en la punta de ataque se encontraba Sonny Anderson. Ha llegado a declarar que, al observar al brasileño, decidió colocarse las medias por encima de las rodillas.

En el Mónaco coincidió con su amigo David Trezéguet al que conocía de su período de formación en Clairefontaine. Sus habilidades le sirvieron para ser internacional por primera vez en 1997 y para que Aimé Jacquet contara con él para el Mundial de Francia en 1998.


Formó parte de aquella plantilla histórica para el fútbol francés que conquistó en Mundial en casa. Aquel equipo multirracial contaba con veteranos como Desailly o Deschamps y jóvenes promesas como el Propio Thierry y Robert Pirés.


Fue el máximo goleador de la selección francesa en aquel Mundial marcándole un gol a Sudáfrica, dos a Arabia Saudí y anotó un penalti ante Italia en la tanda de cuartos. Su compañero David Trezéguet también tuvo una notable aportación goleadora en el torneo.

Siempre encontró en la figura de Zinedine Zidane más que un compañero. Su amigo marsellés fue la gran estrella del Mundial de 1998 anotando dos goles en la final de París. Comentó Thierry en una ocasión que Zizou es algo muy especial.


Con tan sólo 20 años, Henry se proclamaba campeón del mundo y se convertía en uno de los jugadores más cotizados de Europa. Muchos grandes se pelearon para llevárselo entre ellos Real Madrid y Barcelona.


Su buen papel en el Mundial le sirvió para que la Juventus finalmente se llevara a Thierry Henry. En las filas bianconeras no tuvo mucho protagonismo al jugar muy escorado por banda. Sólo estuvo allí dos meses antes de que...


...Wenger lo rescatara de las filas turinesas para llevárselo al Arsenal en 1999. El técnico francés lo conocia de su etapa en el Mónaco y lo apuntó para el equipo gunner que, por cierto, estaba plagado de jugadores franceses como Petit, Vieira, Parlour o Pirés.


En el año 2000 Francia volvió a mostrar su supremacia a nivel continental y conquistó en Bélgica y Holanda la Eurocopa. Henry se destapó como máximo goleador del torneo, de nuevo. Con 22 años, el galo ya contaba en su palmarés con un Mundial y una Eurocopa. Casi nada.


En el Arsenal, Thierry Henry ocupaba la temible posición de delantero centro, materializando las ocasiones que el poderoso centro del campo formado por Patrick Vieira le brindaba.


Es el máximo goleador del Arsenal por encima de Ian Wright y un icono histórico de la historia del club londinense. De hecho, los aficionados gunners le llegaron a dedicar una canción.

 Suyo fue el gol que apeó al Real Madrid de la Liga de Campeones en la temporada 2005/2006.


Tres Premier's y cuatro FA Cup's fueron los títulos que el francés logró vestido de gunner pero...

...la Champions fue el único gran título que se le resistió con el Arsenal. En 2006 estuvo a punto de ganarla pero su futuro equipo, el Barcelona, le privó de levantar la Orejona.

En el año 2006 Henry estaba considerado uno de los mayores jugadores del mundo. Con esta vitola, acudió al Mundial de Alemania y demostró con creces la calidad que atesora siendo, de nuevo, máximo goleador del equipo bleu.

Ese mismo año Zinedine Zidane aunció que tras el Mundial de Alemania se retiraría del fútbol profesional. Un Thierry Henry más maduro que el de los Mundiales de Francia y Corea-Japón ocupaba la posición de killer mientras Zizou, de mediapunta preciosista, abastecía de balones al delantero francés.

Tras eliminar a España, Brasil (con gol suyo) y a Portugal, Francia se clasificaba para la gran final de Berlín donde le esperaba nada menos que...

...la selección italiana de Buffon, Cannavaro, Grosso y compañía. No viviría la misma sensación que en 1998 pues Francia cayó en los penaltis. Así, en un mismo año a Henry se le escapó un Mundial y una Liga de Campeones.

En junio de 2007, el Fútbol Club Barcelona anunciaba el fichaje de Thierry Henry para las cuatro próximas temporadas por 24 millones de euros. De este modo, en el equipo culé coincidió con Ronaldinho, Eto'o y Messi en una delantera a la que los medios de comunicación no tardaron en llamar: Los cuatro fantásticos.

En noviembre de 2007, Henry se convirtió máximo goleador histórico de la selección francesa por encima de Michel Platini tras marcar los dos goles del triunfo ante Lituania en un partido de clasificación para la Eurocopa de Austria y Suiza.

Su primera temporada en el Barça (2007/2008), coincidió con el fin de ciclo de Rijkaard. Ese mismo año, tuvo que vivir en primera persona el pasillo ante el Real Madrid y una temporada para olvidar.

En la Eurocopa de 2008, Francia estaba encuadrada en el llamado grupo de la muerte junto a Rumanía, Holanda e Italia. No pasó de ronda y Henry sólo pudo marcar un gol, contra Holanda en un partido en que los bleus perdieron por 4-1.

No obstante, el año siguiente fue maravilloso. De la mano de Pep Guardiola, el Barça conquistó el triplete y...

...Henry pudo levantar por fin la Copa de Europa, el único gran título que faltaba en su extenso palmarés.

 Su mejor partido con el Fútbol Club Barcelona data del 2 de mayo de 2009. Efectivamente, se trata del chorreo al Real Madrid en el Estadio Bernabeu donde Tití marcó dos de los seis goles del equipo culé y recordó al jugador que vimos en el Arsenal años atrás.

Esa noche Tití conquistó Roma cual emperador. Fue titular en la gran final ante el Manchester United, vigente campeón. Desestabilizó en numerosas ocasiones a los férreos Vidic y Ferdinand y, tras muchos años de lucha, la Champions fue suya.

Además, cayó las bocas que acusban a su bajo rendimiento. Fue su mejor temporada como culé, jugó bien e hizo jugar bien. Ya no jugaba de delantero centro como en el Arsenal. En cambio, estaba más escorado en banda y ocupaba un papel más táctico.

En la temporada del triplete, además se convirtió en el tercer goleador histórico de la Liga de Campeones por detrás de Raúl y Ruud van Nistelrooy al superar el récord de Alfredo DiStéfano en el partido de octavos ante el Lyon.

No obstante, su tercera y última campaña en el Barcelona fue muy discreta, su nivel fue muy bajo, Pedro le robó la titularidad y sólo pudo marcar tres goles. En definitiva, el Henry de ese año no era ni la sombra de lo que fue.

Su jugada más polémica fue la mano que ante Irlanda del Norte que valió la clasificación de Francia para el próximo Mundial de Sudáfrica 2010. Después pidió disculpas pero fue crucificado por muchos medios.

En el Mundial de Sudáfrica, Francia protagonizó una vergonzosa participación confirmando, así, el final de ciclo desde que se fue Zizou. El combinado francés sólo pudo marcar un gol y fue aplastada en un grupo formado por Uruguay, México y la anfitriona. Después del Mundial, Henry anunció su retirada de la selección.

En el verano de 2010, Henry renunció a la temporada que le quedaba con el Barça y emprendió la aventura por Estados Unidos, una tierra muy querida por Thierry. Fue fichado por el Red Bulls de Nueva York donde acabará su carrera, donde siempre ha querido.
En enero de 2012 volvió temporalmente al Arsenal por dos meses para ayudar al equipo de Wenger, infestado de lesiones, y con la intención de no perder la forma. El 9 de enero marcó su gol 227 como gunner ante el Leeds United en la FA Cup. Permanecería en el cuadro londinense hasta febrero de 2012 cuando se dio por concluida su cesión en Inglaterra.

 

21 de marzo de 2011

Reyes sin corona


¿Quien dijo que la vida fuera justa? En general, no lo es y, como no podía ser de otro modo, el fútbol no se libra de ello. A lo largo de la historia, ha habido innumerables futbolistas a los que se les ha resistido una competición concreta. Su palmarés por lo general es amplio, aunque siempre conservarán una espina relativa a esa copa especial que nunca brillará en su vitrina. Evidentemente, hemos conocido a muchos jugadores así pero el registro histórico es mucho más amplio. Estos son los casos más sonados.


Por ejemplo, Ryan Giggs. El mítico jugador galés ha ganado todos los títulos posibles con la camiseta del Manchester United y, de hecho, está considerado una leyenda para los Diablos Rojos donde sigue jugando pese a sus 40 años, uno de los jugadores más veteranos en vestir una camiseta de un equipo de primer nivel. Sin embargo, el galés nunca ha pisado una Copa del Mundo por su condición de ser internacional con Gales.


Parecido es el caso de Alfredo Di Stéfano que tampoco llegó a jugar nunca un Mundial. La Saeta Rubia jugó con Colombia, España y Argentina. En el Mundial de Brasil, Argentina tomó la decisión de no acudir, para Suecia 1958 España no logró clasificarse, en Chile 1962 se lesionó en el antepenúltimo partido de preparación y en 1966 su carrera se encontraba ya en el ocaso.


Si bien Di Stéfano erigió su leyenda en la Copa de Europa y no asistió a ningún Mundial, a Maradona le pasó justamente lo contrario. El Pelusa fue el artífice del éxito de su selección en México 1986 y, además, también asistió a los Mundiales de España 1982, Italia 1990 y USA 1994. Sin embargo, en su amplio palmarés no figura ninguna Copa de Europa. Lo más cerca que estuvo de una Orejona fue en la final de Sevilla en 1986 donde el Barcelona perdió, contra todo pronóstico, ante el Steaua de Bucarest. Eso sí, su particular vitrina europea no está completamente vacía. Cuenta con la UEFA ganada en su estancia en Nápoles.


Edson Arantes do Nascimento, más conocido como Pelé, puede presumir de ser el único jugador de la historia que ha logrado ganar tres veces el Mundial. Además de ello, está considerado uno de los cinco mejores jugadores de la historia, es una leyenda del fútbol brasileño, uno de los máximos artilleros de la canarinha y del Santos, entre un montón de récords más. Pero sus registros se quedan al otro lado del charco. En el viejo continente nunca tuvo la oportunidad de jugar. Anecdóticamente, es socio del club más antiguo del mundo: el Sheffield United inglés, fundado en 1855.


En el fútbol inglés, Andy Cole no obtuvo todo el éxito marecido. Este gran delantero del Manchester United de finales de los noventa ostenta el récord de ser el segundo máximo goleador de la Premier League con 187 goles por detrás de Alan Shearer. Sin embargo, con la selección inglesa el gol se le resistió, de hecho, sólo marcó un gol como internacional ante Albania.


A Ronaldo se le resistió la Copa de Europa. Pese a haber jugado en cinco clubes campeones de Europa (PSV Eindhoven, Barcelona, Inter, Real Madrid y Milan), no ha conseguido levantar la Orejona. Si bien es cierto que en 2007 el brasileño fue transferido del Real Madrid al Milan y el conjunto lombardo ganó la Champions aquel año. No obstante, para que se considere que un jugador ha conseguido tal o cual titulo, debe haber formado parte de la plantilla desde principios hasta final de temporada y Ronaldo se marchó al Milan en enero de 2007.


La mala fortuna de Michel Platini tomó escena en la Copa del Mundo. La selección francesa liderada por él alcanzó las semifinales en los Mundiales de España 1982 y México 1986. De manera dramática en la primera edición, tras el empate a tres ante Alemania cayó en la tanda de penaltis en Sevilla. Cuatro años después, los verdugos para los galos también fueron los alemanes que los apearon en el Mundial de México. Aunque Michel Platini es una leyenda en el fútbol francés, no ganó ninguna Copa del Mundo. En cambio, si conquistó Europa al ganar con su selección la Eurocopa de 1984.


El gran artífice del fútbol moderno e inventor del fútbol total en la década de los setenta tampoco tuvo la fortuna de levantar una Jules Rimet. En efecto, Johan Cruyff, considerado uno de los mejores jugadores de la historia, no ganó ningún Mundial. Su caso es aun más desdichado, si cabe, que el de Michel Platini puesto que el holandés llegó a la final del Mundial que perdió ante la Alemania de Beckenbauer y Müller. Además, en la Eurocopa de 1988, que ganó Holanda, el gran Johan ya estaba retirado como futbolista. La Copa de Europa es su competición fetiche. La ganó como jugador en el Ajax de Ámsterdam y en el Barça como míster.


El caso de Éric Cantona también llama la atención. Como hemos dicho antes, Francia llegó a las semifinales del Mundial de 1986. Tendrían que pasar doce años para que les bleus pisaran de nuevo un campo de la Copa del Mundo. Los mundiales de Italia 1990 y Estados Unidos 1994 tuvieron que ser vistos por los franceses a través de la televisión dado que Francia no se clasificó para jugarlos. En el de Estados Unidos, un error de David Ginolá en el último minuto del último partido de clasificación ante Bulgaria sirvió para que Emil Kostadinov rompiera en añicos todos los sueños franceses. El período de actividad de Eric Cantona en la selección francesa fue básicamente ese. En el Mundial de 1998, l'enfant terrible ya se había retirado. Por tanto, el galo tampoco pisó nunca una Copa del Mundo.


Zlatan Ibrahimovic ha jugado en cinco clubes campeones de Europa como Ájax de Ámsterdam, Juventus, Inter, Barcelona y Milan. Recuerda al caso de Ronaldo salvo que el sueco aún sigue en activo. Su caso es especialmente curioso. Jugó en el Inter el año que el Barça ganó el triplete y jugó en el Barça cuando el Inter conquistó los tres títulos en una temporada. El sueco actualmente milita en el PSG, equipo con grandes aspiraciones esta temporada y donde está rindiendo a un magnífico nivel.

18 de marzo de 2011

FCB: Máximo exponente de los valores futbolísticos (VI)


El pasado martes todos nos conmocionamos al oir la noticia que asolaba al panorama futbolistico. Al lateral izquierdo del Fútbol Club Barcelona Éric Abidal se le había diagnosticado un tumor en el hígado tras una rutinaria intervención sometida por el club.

Particularmente, escuché la inquietante noticia mientras veía el Bayern-Inter correspondiente a los octavos de la Champions y me quedé de piedra. El jugador francés se pierde el resto de temporada y su baja será sustituida por el canterano Andreu Fontás. Creo que nos ha afectado tanto porque conocemos a Eric y sabemos que es un tipo formidable, el alma del vestuario, un bromista y un buen chico. Esta oportunista enfermedad le ha llegado cuando atravesaba su mejor temporada desde que llegara al club allá por 2007.

El centrocampista del Barça, Xavi Hernández, realizó el miércoles unas declaraciones acerca de la enfermedad de su compañero. Ha sido la noticia más dura. Se puede ganar o perder, vivir situaciones límite futbolísticamente hablando pero esto supera todo lo vivido en lo que a deportes se refiere. Estamos hablando de la vida de una persona. El jugador catalán declaró, además, que la noticia ha supuesto: El golpe más duro que he recibido en un vestuario.

La mañana siguiente a conocer la noticia, Abidal se pasó por la Ciutat Esportiva antes de acudir al Hospital Clinic. En relación a esto, Xavi comentó que lo ha visto sorprendentemente bien, incluso ha sido el jugador francés el que les dio ánimos a sus propios compañeros. Esta tarde, a partir de las cuatro, Éric Abidal acudió al quirófano donde fue intervenido del tumor diagnosticado por el doctor Josep Fuster Obregón. La intervención ha concluido satisfactoriamente, sin incidencias, tal como todo estaba estipulado y se espera que el futbolista galo reciba el alta en una semana.

Por todo ello, la psicóloga Beatriz Galilea, responsable del Departamento de Psicología del Centro de Estudios de Alto Rendimiento Deportivo (CEARE), entidad adscrita al Consell Català de l''Esport de la Generalitat de Catalunya ha asegurado que esta noticia, lejos de suponer una fisura en el vestuario del Barça, unirá más en los jugadores puesto que todos son una piña y que incrementará los valores del barcelonismo.

Desde que el club emitió el comunicado anunciándola, han sido muchísimos los mensajes de ánimo y fuerza a través de redes sociales como Twitter y Facebook. En referencia a las palabras de Xavi Hernández, Beatriz Galilea ha declarado que ello demuestra la unión y complicidad existentes en el vestaurio. Es una noticia a la que no están acostumbrados y trasciende del plano deportivo. Dicho esto, el equipo ahora transmite valores personales y va mucho más alla de lo meramente deportivo.

También ha comentado que saldrán más reforzados, más motivados pero el Barça actuará como sabe y no se dejará atormentar por este golpe tan bajo. Además, se notará el hueco que Abidal deja en el vestuario durante su período de recuperación. Apunta la psicóloga que el jugador francés es muy fuerte psicológicamente en el vestuario. A buen seguro que todos seguirán adelante pensando en la exitosa recuperación de su compañero.
 
Por alguna razón que escapa a mi entendimiento, la UEFA no les permitió el pasado miércoles al Real Madrid y al Lyon saltar al césped con camisetas de apoyo a Éric Abidal. Como mucho, les permitia guardar un minuto de silencio porel trágico tsunami de Japón. No obstante, al finalizar el encuentro en el que el Madrid rompió el gafe de siete años, pudieron mostrar la elástica en homenaje al francés.
 
Gestos como éste ennoblecen al fútbol al mostrar que, cuando se trata de la vida, no hay color. Chapeau!