En pleno transcurso de la Copa América de Paraguay 1999, tuvo lugar uno de los hechos futbolísticos más estrambóticos que se recuerdan en la competición. Corría el 4 de julio de aquel año y las selecciones de Argentina y Colombia se enfrentaban en la fase de grupos. En aquel encuentro, el colegiado guaraní Ubaldo Aquino señaló nada menos que cinco penaltis: tres para el combinado albiceleste y dos para el cuadro cafetero. Sin embargo, el protagonista de aquella noche no sería otro que Martín Palermo.
El delantero argentino protagonizaría una de las anécdotas más inverosímiles que se recuerdan en la Copa América al fallar los tres penaltis que el árbitro señaló a favor de su selección. Un hecho sin precedentes que traspasó fronteras y dejó a todos tan sorprendidos, como cabizbajos a los aficionados argentinos. El portero colombiano Miguel Calero se convirtió en la némesis del Loco en aquella noche de tan nefasto recuerdo para la albiceleste y, en especial, para el atacante de Boca Juniors.
El calvario de Martín Palermo comenzaría demasiado pronto, a los cuatro minutos del partido. El árbitro paraguayo señaló el punto fatídico tras una mano de Viveros dentro del área. Un penalti de manual que el delantero argentino se dispuso a lanzar desde los once metros. Con la pierza zurda, el disparo del Loco se estrelló en el travesaño, lo que supuso la antesala de una noche francamente para olvidar. Posteriormente, en el minuto 75 de juego, un cabezazo errado de Palermo volvió a parar a la mano de Viveros nuevamente. Palermo tenía en sus pies la oportunidad de resarcirse del anterior disparo malogrado. Lanzaría el segundo penalti de la selección de Argentina que hubiera supuesto el empate a un gol en el marcador. Sin embargo, su lanzamiento acabaría en las nubes.
Pero el tormento de Martín Palermo no acabaría en esa jugada. En el minuto 90, el colombiano Bermúdez derribó en el área al Loco, lo que significó el tercer penalti de la noche para la selección albiceleste. Y también para Palermo. En esa ocasión, Palermo decidiría colocar la pelota a la izquierda de la portería, con menos potencia que en sus dos lanzamientos anteriores. No obstante, Calero acertó el disparo del argentino y detuvo la pelota. Finalmente, Colombia ganó por la mínima aquel encuentro y ambas selecciones accedieron a los cuartos de final del torneo. La selección cafetera sería eliminada por Chile, mientras que Argentina perecería ante Brasil, a la postre, campeona del certamen.
no me hagas acordar de esto!!!! Palermo será mi ídolo goleador por siempre ja.... que buen recuerdo EL Loco en mi vida... no este momento precisamente je.... salu2....
ResponderEliminarGracias, amigo. Un cordial saludo.
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